
La convocatoria será a las 18h en Plaza Universidad y está impulsada por más de 50 entidades sociales y sindicatos laborales.
El coste de la vida se está haciendo insostenible para muchas familias: aumenta el precio de los alimentos, los suministros, la precariedad domina el mercado laboral y acceder a una vivienda es imposible para la mayoría de la población. Por eso los movimientos sociales han hecho hoy un llamamiento ante la Delegación de Gobierno en Cataluña para salir a las calles de Barcelona el próximo sábado 21 de mayo a las 18h a la Pl.Universitat de Barcelona bajo el lema #AixíNoPodemViure.
En la rueda de prensa han intervenido en este orden Lucia Delgado, de la PAH; Guillem Aragonés, del Sindicat de Llogateres; Max Carbonell de la Comisión Jurídica del I Congreso de Vivienda de Cataluña; María Campuzano de la Alianza Contra la Pobreza Energética e Iru Moner de la CGT y Iolanda Segura de la IAC, como representantes de la Mesa Sindical de Cataluña.
La elección del lugar no es casual: las entidades han escogido la sede del gobierno español en el momento que este tiene entre manos la aprobación del Proyecto de Ley de Vivienda, en la que está en juego la aplicación de mecanismos que paren los desahucios, como la obligación a ofrecer alquiler social y la ampliación de garantías para los inquilinos, como la regulación de alquileres (que quedó sin efecto en Cataluña por una sentencia del Tribunal Constitucional), la limitación de subidas interanuales vinculadas al IPC al 2% o la obligación que los arrendadores se hagan cargo del coste de los honorarios.
“Después de casi 2 millones de desahucios en los últimos 10 años, no podemos permitir ni uno más. Hay que recuperar la función social de la vivienda, hoy secuestrada por bancos, fondos buitre y grandes propietarios” ha dicho Lucía Delgado, portavoz de las PAHs Catalanas, durante la rueda de prensa de hoy celebrada ante la sede de la Delegación del Gobierno en Cataluña.
“La ley vivienda puede ser una oportunidad para volver a recuperar la regulación de precios, para pinchar la burbuja de los alquileres y poner solución a las dos grandes precariedades que viven los inquilinos: las subidas de precio y las no renovaciones de contratos» apunta Guillem Aragonés desde el Sindicat de Llogateres de Cataluña.
Max Carbonell, de la Comisión Jurídica del I Congreso de Vivienda ha reprochado a los gobiernos la represión creciente que los movimientos sociales están sufriendo en Cataluña desde el 2020: “Solo el movimiento por la vivienda ya acumula más de 400.000€ de multas durante los últimos tres años para defender los hogares de la gente y el derecho en una vida digna”.
María Campuzano, de la Alianza Contra la Pobreza Energética, responsabiliza los lobbies de la energía del incremento salvaje de los precios durante los últimos años: “Democratizar la energía es imprescindible para hacer bajar los precios de los bienes de primera necesidad y afrontar la crisis climática”.
Por su parte, el Iru Moner, de la CGT Cataluña, ha hecho hincapié en los efectos de la inflación, que desde finales del año pasado está logrando récords que no se habían visto en 30 años: “Los salarios se han quedado estancados. La inflación repercute sobre la clase trabajadora, porque es una cuestión que dificulta el acceso a los bienes básicos”. También ha participado Iolanda Segura, de la IAC, quien ha denunciado que la vivienda no tiene que ser una necesidad, sino un derecho.
Por todo ello las entidades hacen un llamado a la movilización general de toda la población. Para la mayoría de las últimas crisis no hemos salido mejor, más bien lo contrario: cada nueva sacudida económica y social ha servido para transferir la riqueza a manos de unos pocos. El Estado español es el país de la Unión Europea con más desigualdad, según la Comisión Europea. Por otro lado, estudios publicados demuestran que las diferencias en la renta crecen más durante las recesiones económicas como el actual.
Consulta aquí el manifiesto y el listado de entidades convocantes.